Con las pilas puestas!!!!

Ya estoy de regreso de mi corto pero reenergizante viaje. Hubiese querido quedarme un poco más pero compromisos laborales ineseperados (pero bien recibidos) me obligaron a regresar para el día de hoy.

Les cuento... Llegué el viernes en la mañana con unas ganas terribles de desayunar frente a la ventana principal del apto. de mi tía, con la vista espectacular del Avila y ese fresco matutino que adoro (foto adjunta). Tal cual, lo hice.

Al mediodía me encontré con un compatriota maracucho que estaba "homeless" , el cual me acompañó en una tarde de busqueda de encargos que no terminó muy triunfante que se diga. Almorcé divino en Saint Honoré mi clásico sandwich philadelphia en pan negro con chips de papa y ensalada con vinagreta de parchita (DIIOOOOSSS!!!).

Ya en la noche me encontré con Euchy y nos sentamos de nuevo en Saint Honoré a actualizar los brollos (entiéndase como chismes y/o acontecimientos recientes de nuestras vidas). Luego de esto, salió plan con mi primo para ir al San Ignacio a una cata de vinos, pero lamentablemente llegamos tarde.

A todas estas, andaba yo con una gripe nada agradable que trató de impedirme el disfrute pero no lo consiguió, ya que la ataqué con un buen par de rones Santa Teresa gran reserva con limón en un local divino llamado Juan Sebastián Bar donde me encontré con la Euchy nuevamente. La velada fue amenizada con salsa y jazz en vivo, en un ambiente "taguaroso". Absolutamente alucinante.

Para el día sábado se dio un encuentro muy agradable entre Euchy, Beny y yo, por el cual estoy altamente agradecida, en especial a Beny por permitirnos un ratico de su tiempo. Como comentó Euchy, es imposible no sonreir cuando se está con él. Que honor poder conocer gente tan especial y sobre todo romper las distancias de los monitores de PC.

Luego de este divino encuentro, me dio la loquera de hacer una cena en casa de mi tía donde estuvieron invitados Euchy y dos amigos de mi primo. Tan bella mi Eu que me ayudó a cocinar y a recoger el desastre posterior. Gozamos un mundo entre tintos de verano y conversas variadas. Por supuesto, mi plato fue un éxito: lomo de cerdo en salsa de sidra y romero con papas salteadas en mantequilla y perejil. Más adelante les doy la receta.

El día domingo me reuní con otro primo y su esposa. Fuimos a comer criollo y sencillo, pero sabroso. El resto de la tarde la dejé correr escuchando a mi primo Fran, y compartiendo experiencias. Pero sobre todo, dándome cuenta que a pesar de la distancia nos queremos como si viviésemos juntos, y además somos muy parecidos.

Ya con pesar, a las 8:00 p.m. arrancaba el bus con destino a Maracaibo, y yo en él, observaba esta ciudad que tantos consideran intimidante, pero que para mí es tan grata y acogedora que no me dan ganas de dejarla. Lo admito, me confieso enamorada de Caracas porque siento que hay mucho en ella para mí. Probablemente termine mudándome para allá. Por ahora no podré volver, pero para Septiembre seguro me quedo como una semana para así poder compartir con toda la gente bonita que me recibe tan calidamente cada vez que voy.

Gracias Euchy, gracias Beny, gracias Fran y a todos los que hicieron tan grata mi corta pero nutrida estadía en la capital de mi país.

Y bueno, aquí estoy de regreso con las pilas puestas y con ganas de comerme al mundo, como siempre... Se les quiere.

Feliz semana.