viernes, 23 de diciembre de 2011

Resumen del 2011

Señores:

Este año ha sido bien interesante, lleno de altas y bajas emocionales y de nuevos comienzos.

No me quejo, pero tampoco me lleno de emoción al recordar todo lo que pasé en él. Definitivamente el final ha sido MUCHO mejor que el principio, y eso se traduce que ya para el final comencé mis clases de cocina (y valga resaltar que soy la mejor de mi grupo); obtuve considerables mejoras en mi trabajo y mi evaluación de desempeño fue del 94.6%, el cual fue reconocido y felicitado; estoy mejor que nunca con mis compañeros de trabajo y amigos; y lo más importante, estoy sola pero tranquila (aunque hay alguien que revolotea por allí).

Lo mejor de este año ha sido darme cuenta cuanto valgo, y cuanto merezco. Y definitivamente merezco mucho más de lo que tenía.

En resumen, cierro el 2011 agradecida por lo aprendido y obtenido, y con expectativas altísimas de lo que alcanzaré en el 2012.

Ah! Y para cerrar con broche de oro, mi primo Francisco Elias ha sido prenominado a los premios Goya por sonido de un documental(http://www.eluniversal.com/arte-y-entretenimiento/111223/venezolano-francisco-toro-en-candidaturas-a-los-premios-goya). Más feliz aún.

Les deseo a todos que disfruten mucho con sus seres queridos y que tengan un años 2012 lleno de éxito y bendiciones.



Y para ti, espero de corazón que concretes tus proyectos y tu vida personal. Gracias por haberme dejado ir.



sábado, 12 de noviembre de 2011

A propósito del cumpleaños de mi papá y la inteligencia emocional

Hoy mi papá llegó a los 77 años, afortunadamente lleno de salud y lucidez.

Y lo que tampoco ha perdido es la increíble capacidad de pasar de la serenidad y tranquilidad, a la más terribles de las "arrecheras" (extremo mal humor).

Mi viejito, tan lindo como siempre conmigo, se armó una de sus acostumbradas conmigo justo antes de su cumple. Menos mal que aún no existe botella de whisky que no lo haga sonreír.

Su episodio de furia, me hizo recordar la casi inexistente inteligencia emocional que posee. Es una lumbrera en muchos aspectos, pero en las emociones tiene cero.

Cito de Don Daniel Goleman, difusor de la IE:

" El termino inteligencia emocional se refiera a la capacidad de reconocer nuestros propios sentimientos, los sentimientos de los demás, motivarnos y manejar adecuadamente las relaciones que sostenemos con los demás y con nosotros mismos. Se trata de un termino que engloba habilidades muy distintas-aunque complementarias-a la inteligencia académica la capacidad exclusivamente cognitiva medida por el cociente intelectual..."

Weisinger expuso, tomando como referencia a Peter Savaloy y John Mayer, los cuatro componentes y habilidades básicas de la IE:

1. La capacidad de percibir, valorar y expresar emociones con precisión.

2. La capacidad de poder experimentar, o de generarlos a voluntad, determinados sentimientos, en la medida que faciliten el entendimiento de uno mismo o de otra persona.

3. La capacidad de comprender las emociones y el conocimiento que de ellas se deriva.

4. La capacidad de regular las emociones para fomentar un crecimiento emocional e intelectual.

Según esto, mi viejo no tiene la capacidad de saber cuando, como y donde expresar sus emociones. Le tiende a tragarse TODO lo que siente, a cargar con culpas ajenas, y a pretender que todo está bien, y que está en total control de lo que siente. Pero cuando le pasa una mosca volando por el frente, explota tal cual bomba de Iroshima (con hongo nuclear y todo).

Resumiendo, mi papá casi arruina su cumpleaños por un BRUTO emocional.

Lastima que por ahí andan unos cuantos que son igualitos.


viernes, 28 de octubre de 2011

28 de Octubre

Hoy es el gran día.

Comienzo lo que hace años debí haber comenzado; mis estudios formales en gastronomía. Siempre he sabido que este es mi camino, y se que tendré éxito. Por fin seré quien en gran parte soy, y me podré expresar de la manera que siempre he soñado.

Y hoy por fin hago cierre de los últimos 3 años de mi vida que, a la final, no dejaron nada. Y lo celebro con el cociertazo de Franco que no quiso venir a ver, y la botella de misiones que no se quiso tomar. Hoy, finalmente, te terminas.


Hoy termino y recomienzo en una mejor persona.

lunes, 10 de octubre de 2011

lunes, 19 de septiembre de 2011

19 de Septiembre


“La mayor cobardía de un hombre es, despertar el amor de una mujer, sin intención de amarla.”

Bob Marley


Llegué a la conclusión de que hoy, no hay más nada que decir.



sábado, 27 de agosto de 2011

Ya falta poco!!


En unos días llegará al país mi mejor amiga, hermana y mamachonga Adriana. Viene a casarse por la iglesia con Kco, y a pasar unos días aqui mientras resuelven asuntos de la visa.

Hace 2 años que no la veo, y se me llena la barriguita de muchas mariposas de pensar que por fin la voy a "amapuchar" y además acompañarla en su mega matrimonio en la playa y en la despedida de soltera que no puedo tener cuando se caso por el civil.

Dentro de tanta cosa desagradable y rutinaria, por fin algo bueno por lo cual sonreir bastante.

domingo, 14 de agosto de 2011

Algo de Franco


Franco de Vita ha sido de esos cantantes que todo lo que saca, me gusta. En esta canción donde canta con Alejandra Guzmán (otra de mis cantantes de chamita), el tipo se botó.




Por favor, disfruténla


domingo, 17 de julio de 2011

Una fracción de Liz

Me encuentro viendo el partido Venezuela vs. Chile, y mi país va un gol por arriba de sus adversarios. A parte estuve viendo "my life as Liz". Admito que me encanta. Aqui les dejo un momento crucial de la serie.




Les traduzco:

"Tiene que haber arte por alguna parte aquí. Tienes que juntar cosas, nose.... Toma los rascacielos de nueva york; algunos de estos edificios los miras de cerca y no son edificios bonitos, tienen todo tipo de sucio y están gastados. Pero dejas de verlos muy de cerca y te das cuenta que justo al frente de ti hay unos rascacielos impresionantes, has estado debajo de tu nariz todo el tiempo. Ya sabes... Es como nosotros. Osea, pasamos todo el año tratando de deducir que somos, perdiendo llamadas y malinterpretando mensajes de texto, y volviéndonos locos con que es nuestra relación, que significa. Y pasamos el día aquí sin pensar en absoluto en ello, y simplemente funciona.... Es perfecto."

En el siguiente capítulo, Liz se entera que Bryson tiene novia.

Me choca cuando sucede así (que es casi todo el tiempo)


nota: corrijo, Venezuela le GANO a Chile 2 - 1. GRANDE VENEZUELA!!!!!


martes, 5 de julio de 2011

Hoy, hace un año...

Hoy en mi país es un día de celebración. Doscientos años de la declaración de independencia, aunque en los últimos doce años no se ha practicado mucho... Pero eso es algo de lo que no quiero hablar.

Hoy celebro, a parte del bicentenario, la recuperación completa de mi amigo Wal. Hace un año sufrió un terrible accidente mientras trotaba en un parque conocido como "la vereda del lago". Recuerdo que yo estaba en la piscina ese día, relajándome; y la noticia me llegó días después por facebook donde vi una foto de él en una camilla de hospital.

Lo fui a visitar como a las tres semanas en su casa. Allí me contó que mientras entrenaba en un sector donde no se permite el tránsito vehicular en el parque antes mencionado, una mujer inconsciente enseñaba a su hija a manejar, esta perdió el control de la camioneta y le chocó por detrás. El describe segundo a segundo lo que sintió y como fue. Yo les resumiré el asunto en que fue horrible y prácticamente le desprendió el pie derecho de la pierna. Los pronósticos del médico no fueron lo más alentadores, podía recuperarse pero tardaría más de un año para caminar, y no se sabía si podía volver a trotar y correr como antes.

Yo me sentí destrozada, no podía creer que el hombre que desde que lo conozco había demostrado tanta fuerza, valentía y decisión en cada aspecto de su vida, iba a perder la capacidad de hacer lo que más disfrutaba. El, al contrario, se mostró optimista y sonriente. Me dijo que no iba a esperar un año para caminar, lo haría en menos tiempo. Y así fue. A los cuatro meses estaba en muletas y ya apoyaba el pie, a los seis meses estaba en bastón, y a los ocho o nueve meses ya estaba caminando sin casi dificultad.

Hoy, terminó la vuelta que hace un año no pudo con toda su capacidad, como si nada hubiese pasado.

Wal: como te he dicho en varias oportunidades, me siento más que orgullosa de ti. A pesar de haberme asustado al principio, nunca dude de que lograrías tu recuperación por completo. Eres el único ser que conozco que es capaz de lograr lo que se propone de corazón, cuando de verdad lo desea. Eres una fuente de inspiración para mí, y modelo a seguir. Agradezco enormemente el día que nos encontramos, porque así debía ser. Te considero mi amigo, mi hermano, mi angelito de la guarda y mi familia. Te re-amo, y espero seguir contando con el honor de tu cariño y comprensión (y regaños), a pesar de las distancias que en algún momento nos separen geográficamente.

Gracias por enseñarme (a diferencia de otros) que si se consigue todo lo que verdaderamente se quiere.


P.D: ¿ya compraste los anillos?




lunes, 27 de junio de 2011

Someone like you


Esta canción la escuché por pura casualidad, pero creo que la escuché en un momento oportuno. a parte, me encantó la voz de esta cantante.




Disfrútenla


lunes, 13 de junio de 2011

Algunas palabras para ti

Hace unos cuantos minutos que te escribí y no has respondido. supongo que andas corriendo con las maletas y sobre todo con los papeles que te tienes que llevar.

Muy probablemente leas esto cuando regreses; inclusive me atrevo a decir que pasarán al menos un par de semanas antes de que te enteres de este escrito.

¿No te parece irónico? que te hable sin tu escucharme. Sin que sepas que es lo que me está pasando. Pues me pasan mil y un cosas, y de esas mil y un cosas he querido hablar desde hace un buen tiempo. En un par de oportunidades he intentado ahondar en "ese tema", y aunque te he dicho todo lo que pienso, no consigo que tu me termines de decir lo que piensas y sientes.

¿Sabes? siempre me prometo que esa vez será la última vez que nos veamos, y que te lo voy a decir y no te voy a ver más ni hablaré más contigo. Y como te pudiste dar cuenta, no cumplí con esa promesa. La cuestión es, que no se cuanto tiempo más será conveniente (y sano) seguir así. Ya te lo he dicho antes, pero parece que se te olvida.

Si bien me dijiste y aclaraste que no me puedes dar lo que yo quiero, ¿porqué insistes en quedarte, en buscarme y en volver cada vez que te digo que desaparezcas? Después de todo este tiempo, sigo sin entender. Tú sabes porqué sigo contigo, y porque continuo recibiéndote después de haberte echado. Créeme cuando te digo esto: si lo siento (eso que te dije que siento por mi perrita cuando íbamos caminando en busca de una barra decente para sentarnos). Pero, no te las voy a decir, porque simplemente me rehúso a quedarme sin esa misma frase de regreso.

Me dueles más de lo que te disfruto. Y para ti es lo contrario. No hay balance.

Dime entonces, ¿qué hacemos?


lunes, 23 de mayo de 2011

Bibo No Aozora

Esta pieza fue el soundtrack de una historia no tan vieja. Hoy se encuentra huérfana de protagonistas.

Ojalá apareciera quien le de sentido de nuevo.




Disfrútenla


jueves, 5 de mayo de 2011

The mean girl they see in me


Soy una simple profesora de inglés para niños. Trabajo para un centro binacional (USA-Venezuela), en un programa outsourcing para colegios privados y públicos.

Como muchos, no me desempeño en lo que me gradué. Y como he expresado en post anteriores, no estoy muy contenta al respecto.

Ayer salí del trabajo con un compañero que iba en mi misma dirección y le comenté acerca de un sitio que vende merengadas, así que decidimos parar allí antes de irnos a nuestras respectivas casas. En el camino a este lugar, mi compañero (que es una maravilla de ser humano, sincero, auténtico y positivo en todos los aspectos de la vida) me comenta que cuando me conoció no le había caído bien. Me sorprendió muchísimo porque siempre de ser amable con todos y de parecer approachable.

El continuó diciendo que le había parecido odiosa, ya que cuando llegaba a almorzar me sentaba sola y no hablaba con pocos (en realidad me daba pena sentarme en una mesa e interrumpir a quienes ya estaban almorzando y conversando). También me dijo que le recordé al personaje de Regina George en Mean Girls the queen bee, ya que me veía selfconfident, distinguished, and bitchy (the mean kind). Y que otros compañeros de trabajo me veían de la misma manera, inclusive aquellos que son extranjeros. Pero luego de tratarme se dio cuenta que no soy bitchy.

Jamás pensé que proyectara esa imagen. Me sorprende muchísimo y aún no me explico como lo hago. De pequeña fui molestada por niñas, y luego adolescentes como el personaje de la película citada anteriormente. Creo que en mi afán por no seguir siendo maltratada, aprendí a disfrazarme de "sifrina" (así le decía a las que se metían conmigo)

Me perturba un poco que vean a mi Regina interior, pero a la vez me gusta. No se... Maybe I am a queen bee after all.



jueves, 21 de abril de 2011

Con un poco de nostalgia


Jueves en la tarde, la ciudad ausente y tanto silencio...


No me queda más que recordar.



miércoles, 6 de abril de 2011

Un poco de novela

Como buena venezolana, crecí alimentando mi cuaima interior viendo las famosas novelas producidas por RCTV y Venevision (canales nacionales). Pero con la llegada de Directv refiné mi gusto, y ahora me quedo con las series semanales.

Desde que la estrenaron, no he parado de ver Grey's Anatomy. La he denominado mi culebrón favorito (así se le dice aquí a las telenovelas cargadas de escenas dramáticas y situaciones complicadas). Esta escena cada vez que la veo lloro como si fuese la primera vez. Es una de mis favoritas:




El no fue, se quedó callado. Decidió no firmar los papeles. A veces duele, me hace recordar


Abrazos grandes!


sábado, 26 de marzo de 2011

De mi relación con la capital

Me siento afortunada de haber nacido en Maracaibo, pero también de ser hija de una andina y un caraqueño. Esa diversidad me ha enriquecido a nivel cultural y moral. Siento gran amor y respeto por mis tres tierras, pero como buena "niña de papá" me inclinó más por mi ascendencia capitalina.

Recuerdo que desde muy pequeña me encantaba visitar a mi tía y primos. Llegar a la capital era como llegar a otro país. Me consentían hasta más no poder, y visitaba a toda la familia. Con los años mi percepción fue cambiando, y fui viendo otros aspectos aún más hermosos. Caminar por las calles de una de las zonas más bonitas, desayunar en sus famosas panaderías. Comprar en sus pequeñas tiendas. Salir a los locales nocturnos más exclusivos del país, y visitar los clubes de la gente de la high, me hacían sentir más importante, más cosmopolita.

De unos años para acá, la capital me habla más y más claro. He sentido la necesidad de irme hasta ella y hacer vida allí. Algo me conecta profundamente con su ser. Ese aroma a horneado en las mañanas, el sol que sale tempranito, el fresco que permanece en el ambiente durante el día y se intensifica en la noche. El verde de los arboles que veo por doquier. El ritmo acelerado, pero lento a la vez de sus habitantes. Esa manía de pretender que todo está bien, a pesar de que todo está mal. La cantidad absurda de vinos que se consiguen en un supermercado, y los litros que se se consumen. Los mejores chocolates del país a solo dos cuadras de donde vive mi tía. Los mil y un restaurantes, y mil y un centros de recreación, arte, teatro...

Y en especial, las carreras en el metro para no llegar tarde, la molécula del museo de los niños (que volvía a estar cerrada por mantenimiento), y el Avila con el Humboldt que se ve brillar desde la autopista. Y el hermoso mural que espero se mantenga dentro del hotel y el cual mi abuela Margarita vio tantas veces. El obelisco de la plaza Francia. El contraste del frío con el mar de Galipán (donde creo no volveré a estar). El hotel Avila con sus pisos blanco y negro, donde mi papá y mi tía debieron correr mientras mi abuelo Alfredo fue gerente.

Tantos recuerdos, y tanta historia. Gran parte de mi vida se ha desarrollado en esta ciudad que es tan querida y tan odiada.

Hace poco la volví a ver, y esta vez fue muy distinto. Le faltó romanticismo, le faltó gente, le faltó conversación. Ver el Humboldt nuevamente brillar desde la autopista me llenó de tristeza. Verla desde otros ojos no valió la pena. Le pedí perdón por no haberle dado lo que ella se merece cuando voy a visitarla. No se si pueda volver a verla como antes, no sin los detalles, y las historias, y las vistas desde la cota mil. No sin esa forma de mirar que me hizo quererla y necesitarla.


miércoles, 9 de marzo de 2011

Confesiones de una mala mujer


Este relato está inspirado en las cientos, o tal vez miles de conversaciones con diferentes mujeres a lo largo de mis 29 años. Confesiones que me hicieron, y confesiones que algunas veces hice.


No ha sido la noche especial que esperaba. Aunque nose porque sigo esperando a que alguna lo sea.

Fue el mismo show: una llamada, un encuentro, alcohol y un polvo satisfactorio, más no memorable; voltearme, vestirme e irme. ¿El mejor momento de la noche? Cuando me acosté sola en mi cama.

Dejé de llevar la cuenta de cuantas veces a sucedido lo mismo, y cuantas veces he experimentado el mismo vacío. Ese vacío que persigue a las malas mujeres, como yo.

Si, he sido una mala mujer y durante mucho tiempo. Cumplo con las tres características básicas: Promiscua: Si. Egoísta: Muchas veces. Sola: Siempre…

Confieso que la norma social de castidad impuesta a las mujeres, me fastidia. Acepto que hombres y mujeres no somos iguales, y no lo seremos. Pero cuando se trata de placer, tenemos el mismo derecho a buscarlo, y obtenerlo.

No voy a negar que he roto la norma, y la moral la engaveté en más de una oportunidad. Por momentos dejé de pensar en el no le hagas a los demás lo que no te gustan que te hagan. Es cierto, nose hace; pero a veces me ha sido difícil no… Mentira! No me ha dado la gana de pararle bolas. Otros engañaron a sus parejas conmigo, y me lo gocé.

Aunque aquella noche de septiembre cuando me encontré con él, mi concepto de lo incorrecto cambió. Cuando me desperté a su lado y lo sentí, me dieron ganas de seguir sintiendo lo mismo todos los días. Creo que estaba… feliz; si si, lo estaba. Inclusive, cuando lo escuché hablando por teléfono con ella, no me importó, no me molestó, no me incomodó (bueno, un poquito).

Pero a las malas mujeres la falsa idea de la felicidad nos dura poco. Fue con ese maldito mensaje erróneamente enviado que la realidad me dio un golpe directo a la quijada. Estaba metida en el medio de algo que no era mío, que no me pertenecía. Estaba evitando que una pareja correctamente establecida disfrutara de un fin de semana romántico. ¿Por qué lo estaba haciendo? ¿Qué me pasaba? ¿Por qué ahora me importaba hacerle daño a otra?

Allí fue que entendí que una mala mujer nunca será la primera, nunca será tomada en serio. Estamos para complacer, no para ser complacidas. Yo nunca iba a ser tomada en serio. Una mala mujer no obtiene el titulo de “señora”, o de “la principal” Ella no tenía la culpa, no la tiene. No tengo porque hacerle daño. Ella se ganó su título, y él la escogió como compañera de vida.

Una mala mujer, nunca será suficiente para ningún hombre aunque este diga lo contrario. No es cierto que tengamos todo, ni que seamos espectaculares, ni que llegaremos a tener el mundo a nuestros pies. Una mala mujer no basta, no es lo que un hombre quiere. No se enamoran de nosotras. Nadie se enamora de las malas mujeres. No lo merecemos. Yo no lo merezco.

Una mala mujer se conforma con las pocas horas disponibles del hombre. Se conforma con la clandestinidad, y con los gestos diplomáticos en público. Se conforma con sonreír, gozar y entregarse en la intimidad, y pretender que todo es perfecto; y las lágrimas las contiene. Se conforma con esperar una llamada o un mensaje, y a tragarse las ganas de saber de él. Las malas mujeres se conforman con amar y no ser amadas. Una mala mujer se conforma con ser la otra, siempre.

Y cuando no se conforma, una mala mujer se queda sola.

Confieso que me enamoré, y que después de tanto tiempo seguí creyendo, y seguí sintiendo. Pero no me conformé. Y aquí estoy, sola, como siempre…


Confieso que he sido una mala mujer, pero me cansé de serlo.



domingo, 6 de marzo de 2011


Almost one week, and I’m still here.

Breathing…



domingo, 27 de febrero de 2011

¿Qué es la paz?

Escucho todo el tiempo que la piden, que es lo que necesitamos. Pero tengo la triste certeza de que anhelamos algo que no sabemos que es.

A veces creo recordarla, y se sentía bien. Creo que la paz era levantarme en las mañanas tempranito e ir al colegio sin pensar en más nada que la tarea que no había hecho el día anterior. Y en los paseos al cabo San Román, en el ranchón de Margarito; y maravillarme al ver las luces del puerto de Aruba de noche. La paz era las mañanas heladas en el nidal de nubes, y el aroma a arepa recién asada que salía de la cocina de Mariita. El correr con Sebastian en busca de moras frescas al fondo de la posada, mientras Madonna lloraba porque no podía alcanzarnos.

La paz... creo que la sentía cuando me dormía entre mi papá y mi mamá. Todo estaba bien, todo estaba tranquilo, todo estaba donde debía estar, y había lo que debía haber. Pero dejó de ser así hace mucho.

Quisiera por un ratico dejar de sentir el miedo cuando salgo a la calle, y la desconfianza que me genera cualquier ser humano que tenga a mi alrededor. La angustia de tener que sacar cuentas cada vez que me depositan el sueldo. Y la desesperanza de acostarme a dormir cada noche pensando que será de mi vida en un año y no poder hacer planes. La rabia de no tener un centavo para poder escapar a tanto caos. Y más aún, no tener a nadie con quien poder planear ese escape.

Quisiera dejar de sentir la envidia que me da saber que mis amigos se han ido, y los que quedan se irán. Y sobre todo, necesito dejar de sentirme sola, necesito dejar de llorar, y necesito dejar de extrañar.

¿La paz? ¿Alguien me puede decir, por favor, que carajo es la paz?

Se me olvidó...



jueves, 17 de febrero de 2011

Otro año más

Hoy estoy llegando a los 29 años. Me veo de 23 y me siento de 40.

Lamentablemente no puedo decir que me siento dichosa ni que he alcanzado todos mis objetivos a esta edad, porque no es así. La distancia entre mi realidad y mi plan original hace unos pocos años, es enorme.

Tengo lo básico, he conseguido lo básico. Pero nada extraordinario. Para este día, y esta edad pensaba que iba a estar comiéndome el mundo. No tengo el trabajo exitoso y reconocido con el que siempre he soñado, me lo arrebataron de las manos. No tengo grandes bienes materiales (entiéndase carro o vivienda propia), y por supuesto la independencia es casi una utopía. Tengo casi 30 años y tengo que pretender que no siento y no quiero. Ando mendigando amor cuando se suponía que para este día, y a esta edad estaría celebrando dichosa con mi compañero de vida y probablemente mi hijo o hijos.

Hoy que es un día para celebrar, tengo que trabajar doble turno para poder tener un ingreso extra, y para pagar la tarjeta de crédito que llegó al límite por un gasto imprevisto. Y por esto no puedo irme a cenar con mis viejos. A parte tengo una reunión donde se que me dirán que prontamente me quedaré sin trabajo, y con la buena situación de este país… Y para colmo, no tengo quien me saque a comer o me invite un helado, o un trago, o simplemente me lleve a dar una vuelta. Nadie quien me de un regalo tonto, o una flor, o un dulce. No lo tuve en San Valentín, y no lo tendré hoy (él ya tuvo su San Valentín y su cumpleaños, y su aniversario, y su navidad y su año nuevo y su todo con quien debe). Parece que estoy quedando por fuera de muchas ecuaciones.

Así que no tengo ganas de celebrar, no tengo motivos, no tengo dinero, no tengo gente y no tengo tiempo.


Not so happy birthday to me…



lunes, 14 de febrero de 2011

I HATE HATE HATE VALENTINE'S FU%&$ DAY
(I can't make you love me, and that's what I hate the most)