No acostumbro a hacer post tan seguidos, ya que me gusta darles tiempo para que lean con calma (y a mi para pensar mejor lo que voy a escribir). Pero aprovechando que hoy 27 de mayo se cumplen 2 años del cierre del canal RCTV, y del comentario que me hicieron en el post sobre mi primo, expondré un par de cositas. Prometo esperar unos días para el proximo escrito, que ya lo tengo pensado.
Es bien sabido por los venezolanos que rondan este espacio, la situación catastrófica con la que nos toca lidiar a diario. Hace un par de horas, saliendo del gimansio con mi mejor amiga casi fuimos atracadas por un motorizado, que de no ser porque salió otra gente cuando se iba acercando, hubiese hecho de las suyas. En el mes de noviembre de 2008, me arrebataron la cartera un par de carajitos en bicicleta como a eso de las 6 de la tarde, justo cuando iba llegando del trabajo; y en la entrada del edificio donde he vivido practicamente toda mi vida. Lo peor ha sido seguirlos viendo como pasean por la zona, campantes y felices de ser los machotes del barrio que joden a todos pero no son jodidos.
Probablemente, la gente de otros países dirá: "¿de que tanto se quejan los venezolanos de Chavez?" o "ese tipo si esta loco". Y no pongo en duda que en México, Argentina, Ecuador, Bolivia, y los demás países de América Látina, la cosa este dura.
Octavio, se por boca de mi prima hermana que vive en el D.F, que la inseguridad es terrible allá. Claro, con más de 20 millones de habitantes solo en la capital del país, obviamente debe ser como vivir un thriller de terror a diario. Venezuela en su totalidad debe tener alrededor de 26 millones (corrijanme si me equivoco). Pero lo que no tiene México, que si tiene Venezuela, es un Presidente al cual durante los 10 años que ha estado "gobernando" no le ha importado en lo más mínimo aplacar a los delicuentes. Al contrario, parece que ha buscado hacer todo lo opuesto. A parte, en México no creo que el Presidente se esté precoupando por cerrar canales de televisión que expongan lo que sucede, o que él ande promulgando leyes para eliminar la propiedad privada, quitarle la patria potestad de los hijos a sus padres y que estos sean del Estado, o que ponga a todo su gabinete a robarles a empresarios exitosos sus maquinarias, empleados y tierras de cultivo, sin más explicación que "ahora todo es de todos". Pero de todos los que le jalan bolas.
Dudo Octavio, que en México tengan que hacer colas de más de 12 horas para comprar un frasco de aceite para cocinar, o un kilo de leche en polvo. Y que alimentos tan básicos como el pollo, el café y el azucar, desaparezcan por meses de los mercado y abastos. También pongo en duda, que el Presidente de México, ande regalando el dinero de uds. a otros países, mientras sus hospitales, carreteras, escuelas y empresas públicas junto con sus empleados, se derrumban. Aquí, el Presidente le regaló 30 millones de dolares a Evo (presidente de Bolivia) para que construyera carreteras, mientras las vías en Venezuela prácticamente se han vuelto de tierra como en los tiempos de antaño. Y ni te cuento de los demás "regalitos"
Aqui, el gobierno te empuja a teñirte de un color, y con ello a pensar de un color. Si te opones, eres tildado de desestabilizador, fascista, escualido y pare de contar. Y lamentablemente ese color ha cubierto a los ministerios que se supone defienden a la población, al Consejo Nacional Electoral, al Tribunal Supremo de Justicia, y a los militares. Todos ellos, están al servicio del Presidente y no de la gente.
Estoy casi segura, que en México, no se le rinden honores a jefes de las FARC, como lo fue Manuel Marulanda, ni se habla maravillas de Castro y similares.
Y lo que más me preocupa, estimado Octavio; y dudo firmemente que esto suceda en México, es que el gobierno esté intentado reformar los pensum de estudios en todos los niveles de educación, queriendo enseñar que la revolución de Fidel Castro en Cuba es ejemplo a seguir, y que el Che Guevara es un gran procer al que hay que imitar, y apartando de nuestra historia a otros importantísimos personajes. A parte, de querer convertirnos a todos en militares, dispuestos a matar por la patria (o mejor dicho, por el presidente y su "revolución").
Imagino habrás escuchado el slogan de este gobierno venezolano "PATRIA, SOCIALISMO, O MUERTE. VENCEREMOS".
Invito a todo el que no sea venezolano, a que consulte los periódicos online, y se empapen de lo que pasa aquí.
Así que Octavio, creeme cuando te digo que no podría ser peor que vivir en México.
He dicho.